307 Un Mensaje Todavía a Tiempo Para Esos Que Sueñan Con Llegar al Poder Político en Loreto

Queridos aspirantes a la gloria política,

A ustedes: los que ya están afinando sonrisas falsas, apretando manos sudorosas en mercadillos y prometiendo el oro y el moro. Los que, en el fondo, sueñan con un cargo público no para servir, sino para servirse.

Antes de que sigan diseñando sus planillas de allegados y calculando cuánto necesitan para esa mansión campestre que tienen por costumbre adquirir, les traigo una noticia que podría arruinarles el sueño: una vez que lleguen al poder, todos sabrán que sus único propósito es robar. Sí, así de claro. Y lo mejor (o peor, según se mire): el mundo entero los verá como un fracaso, incapaces de lograr algo significativo.

Ahora, siéntense cómodos y permítanme pintarles un escenario.

El Poder: Un Espejo de Mediocridad

Imagínense el día que juran el cargo. Ese momento donde deben sentir que han llegado a la cima. Pues en realidad, es el comienzo de su caída. Porque desde el minuto uno, todo el pueblo sabrá que no están ahí para cambiar Loreto, sino para engordar su cuenta bancaria.

¿Y saben qué es lo peor? Nadie les creerá. Ni sus disculpas, ni sus justificaciones. Cada obra sin terminar, cada carretera abandonada y cada hospital sin terminar y sin medicinas gritará: "Este es otro ladrón más". Y mientras intentan mantener las apariencias, la gente les señalará en la calle como lo que son: mediocres con poder.

La Riqueza: Un Monumento a Su Ruina Moral

¡Ah, la riqueza! Ese botín que tanto anhelan. Quizás ya se imaginan en un yate, brindando con whisky importado. Pero lamento informarles que, para todos, ese lujo será la prueba más clara de su corrupción.

Cada propiedad campestre, cada camioneta 4x4, cada fiesta opulenta será un recordatorio de lo que robaron. Y el pueblo, que sigue viviendo entre aguas contaminadas y escuelas destartaladas, no olvidará decirles: "Mientras tú comes caviar, nuestros niños no tienen ni agua limpia".

¿Podrán disfrutar su riqueza cuando todos sepan cómo la obtuvieron? ¿O se verán obligados a esconderla como si fuera un crimen? Porque: lo es.

El Juicio Constante: Angustia constante y Traición

Ahí estarán ustedes, queridos aspirantes convertidos en gobernantes, atrapados en una jaula de lujo. Rodeados de "amigos" que solo esperan un descuido para traicionarlos. Porque en ese mundo que ustedes desean habitar, nadie confía en nadie.

Cualquier error, por pequeño que sea, será el comienzo del escándalo que los hará caer. Y cuando eso pase, hasta sus aliados más cercanos estarán felices de hundirlos para salvar sus propios pellejos.

El Vacío Existencial del Poder

Y cuando todo esté dicho y hecho, ¿qué les quedará? Por más mansiones, autos y lujos que acumulan, nunca llenarán el vacío que los impulsó a buscar el poder en primer lugar.

Querían reconocimiento, pero solo obtendrán desprecio. Querían ser recordados, pero serán olvidados o, peor aún, recordados como un chiste. Porque el tiempo es cruel con los corruptos: los reducen a notas al pie de la historia, siempre acompañados de la palabra "vergüenza".

El legado del Fracaso

Al final, cuando miren atrás, se darán cuenta de que su gran sueño político no fue más que una farsa. Sus hijos los verán como lo que son: ladrones con traje. Y su nombre será sinónimo de corrupción y miseria.

El poder que tanto codiciaron no les dará la felicidad que creían. Solo les dejará un vacío que ni todo el dinero del mundo podrá llenar.

Una última invitación

Ni los bebés se salvan en las campañas

Pero, todavía están a tiempo de cambiar el guion. Si realmente quieren que su paso por el poder deje huella, hagan algo diferente. Sí, gobiernen bien.

Promuevan el trabajo digno para que las familias de Loreto tengan oportunidades reales de progreso.

Reformen la educación, para que los niños y jóvenes no solo sueñen con un futuro mejor, sino que puedan construirlo con sus propias manos.

Fortalezcan la salud pública, porque un pueblo sano es la base para cualquier desarrollo.

Inviertan en infraestructura para conectar las comunidades y abrir nuevas puertas al comercio, al turismo, a la industria, la producción y al bienestar.

Gobernar bien no es un sueño imposible; es una decisión que exige valentía, integridad y compromiso. Si llegaron al poder, al menos tengan la decencia de cumplir con lo que prometieron.

Y recuerden: el verdadero legado no se mide en las propiedades que dejan atrás, sino en las vidas que transforman. ¿Tendrán el valor de intentarlo? O, como siempre, ¿preferirán ser grabados como otro nombre más en la larga lista de los que solo vinieron a robar?

Así que, antes de seguir soñando con su próxima candidatura, pregúntense: ¿realmente quieren ser recordados como los que vendieron el futuro de Loreto por unas cuantas propiedades? ¿De verdad creen que vale la pena cambiar su dignidad por un poco de poder efímero?

Porque, créanme, el mundo entero sabrá quiénes son en realidad: fracasados ​​que jamás supieron hacer algo significativo con sus vidas.

Jaaaaaajajajajaaaaa ¿Loreto competitivo y exportador? ¿Sabrá el chancho de alfajores? jaaaaaajaaajajajaaaaaa

¿Es ese el legado que quieren dejar? Lo dudo. Pero, al fin, ustedes sabrán si este mensaje les cala... o si prefieren ignorarlo mientras escogen el diseño de su próxima mansión.

El tiempo lo dirá.